Figura 6: Paso paracelular versus transcelular
Las sustancias y células que deben cruzar la barrera hematoencefálica tienen dos rutas posibles: la paracelular y la transcelular.
En la paracelular, el camino se realiza a través de los eslabones entre las membranas celulares, es decir, las uniones de oclusión que están conectando las células endoteliales de la barrera hematoencefálica. En el paso transcelular, el recorrido requiere atravesar la propia membrana celular. Mediante mecanismos que aún no se comprenden del todo, las células que cruzan la barrera hematoencefálica de manera transcelular forman túneles transitorios a través de las células endoteliales, pudiendo así alcanzar el cerebro. En el resto de la vasculatura solo se ha observado el paso paracelular, por lo tanto, la presencia de un paso transcelular hace de la barrera hematoencefálica algo todavía más único.